CON UN TEMPLO RENOVADO, VILLA MERCEDES CELEBRÓ A SU PATRONA
En el año jubilar por los 800 años de la fundación de la
Orden Mercedaria, el 24 de septiembre en la ciudad de Villa Mercedes se celebró
la fiesta en honor a Nuestra Señora de la Merced, patrona de la ciudad. La misa
estuvo presidida por el obispo de San Luis, monseñor Pedro Daniel Martínez
Perea, y concelebrada por el vicario episcopal padre Ignacio Daminato y
sacerdotes de la ciudad de Villa Mercedes.
Desde muy temprano, un grupo de jóvenes y familias,
acompañaron a la Virgen de la Merced en un gran "abrazo materno", una
actividad que consistió en trasladar la imagen religiosa por diversos barrios
de la ciudad.
Asistieron a la ceremonia religiosa el vicegobernador de San
Luis, Carlos Ponce, el intendente municipal, Mario Raúl Merlo, diputados
provinciales, concejales, funcionarios, autoridades educativas, representantes
de la V Brigada Aérea, de la Policía Federal, de la Policía Provincial, abanderados
y escoltas de instituciones educativas.
En esta edición de las fiestas patronales, los presentes
pudieron observar una serie de mejoras en el templo realizadas por el Gobierno
de San Luis: la construcción de la segunda torre, la impermeabilización de los
techos, revoques sectores laterales, incorporación de dos campanas, la pintura
del exterior e interior del templo, la remodelación del techo del templo y diferentes
mejoras en mampostería de la Iglesia Matriz.
Con aportes de la feligresía se asumieron las siguientes arreglos: la restauración del vía crucis, imágenes,
retablo mayor; la iluminación led del interior
del templo y pulido del piso. Por su parte Luis Urquiza fue
el encargado de colocar el reloj nuevo con un sistema electromecanico en
el campanario antiguo y el Hotel Epic asumió los costos de
la restauración de la Imagen ubicada entre las dos torres que fue realizada por
Viveka Rosa y Cesar Libaak.
Finalizada la misa, los fieles se unieron en procesión por
las calles de la ciudad, acompañados por las imágenes de Santa Rita, San Roque,
San José y San Cayetano, y la imagen de la Virgen de la Merced, a cuyo paso los
presentes brindaron aplausos y agitaron pañuelos blancos y amarillos. Además,
una lluvia de pétalos de rosas cayó desde el techo de la Iglesia para honrar a
la patrona.
Finalizada la procesión, el obispo bendijo la imagen que de
ahora en más se encuentra en el pórtico de la iglesia, entre las dos torres, y
la rendición de honores a la Virgen de parte de abanderados y escoltas.
Redacción e imágenes: Jorge O. Sacchi
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