VILLA MERCEDES HONRÓ A SU PATRONA, LA VIRGEN DE LA MERCED.

“La filiación divina nos hace verdaderamente libres”

Los fieles católicos de Villa Mercedes, la segunda ciudad de la provincia de San Luis, celebraron a su patrona, la Virgen de la Merced, el pasado domingo 24 de septiembre de 2017, con la tradicional misa y procesión que partió desde la histórica iglesia matriz para recorrer las calles céntricas de la ciudad con una imagen recientemente restaurada. El obispo de San Luis, monseñor Pedro Daniel Martínez Perea, encabezó la procesión y presidió la misa central de la jornada, que fue concelebrada por el Cura Párroco y Vicario Episcopal presbítero Ignacio Daminato y sacerdotes de la ciudad.

 

De los actos patronales participó el Intendente Municipal CPN Mario Raúl Merlo, entre otras autoridades y estuvo escoltada la imagen de la Virgen por los fieles y alumnos de diferentes instituciones educativas y la Banda Militar de Música de la V Brigada Aérea.

 

El obispo de San Luis manifestó: “Hoy le pedimos a la Virgen mantenernos en la verdadera libertad de los hijos de Dios. Nadie que vive en el pecado es libre, por el contrario se siente preso; y nadie que está en pecado se siente bien. La verdadera libertad de hijos no es hacer todo lo que nos viene en mente, sino en la medida de un orden.”.

 

Mons. Martínez Perea afirmó: La filiación divina nos hace verdaderamente libres, la libertad es en la verdad, no hay libertad sin verdad, nunca hay libertad sin el orden natural. Hoy le pedimos a nuestra patrona, madre de misericordia, que podamos mantenernos y darnos la verdadera libertad de los hijos de Dios y la verdadera libertad, es estar en la gracia y no en el pecado. El obispo pidió a la Virgen: Que ayude a los padres de familia a educar en la verdadera libertad a sus hijos, que los hace madurar y dueños de sí mismo, que los haga elegir siempre el bien.

 

Finalizó diciendo el pastor sanluiseño: Que vuelva a nosotros esos tus ojos misericordiosos, quien no tiene necesidad de esa mirada maternal, todos la necesitamos, una mirada que nos transforme especialmente a los sacerdotes y familias de esta ciudad, en este día especial y lleno de bendiciones.

 

La fiesta en honor a la Virgen de la Merced, de quien la ciudad tomó su nombre en 1861, comenzó el pasado 15 de septiembre con una novena. Durante las nueve jornadas hubo misas diarias, con exposición del santísimo sacramento, confesiones, procesión de antorchas todos los días alrededor de la plaza y la participación de las distintas comunidades parroquiales de la ciudad que celebraron junto a sus párrocos cada día de esta novena patronal.

 

 Redacción e imágenes: Jorge O. Sacchi