Dia de la Bandera Nacional
𝟐𝟎 𝐃𝐄 𝐉𝐔𝐍𝐈𝐎. 𝐃Í𝐀 𝐃𝐄 𝐋𝐀 𝐁𝐀𝐍𝐃𝐄𝐑𝐀 𝐍𝐀𝐂𝐈𝐎𝐍𝐀𝐋.
(Por Instituto Nacional Belgraniano)
El 20 de junio se celebra el “Día de la Bandera Nacional”, establecido por Ley 12.361 del 8 de junio de 1938, en todo el territorio de la República.
Recordemos que un 27 de febrero de hace 211 años, tuvo lugar la creación y el primer enarbolamiento de la Bandera Nacional.
En enero de 1812, el Triunvirato le encargó al entonces Coronel Manuel Belgrano fortificar las costas del río Paraná, a la altura del pueblo de Rosario, para dificultar la navegación a los barcos realistas procedentes de Montevideo y un eventual ataque a fin de destruir las baterías del Rosario, que estaban siendo construidas bajo la dirección del Teniente Coronel Ángel Monasterio. Una estaba ubicada sobre la barranca para dominar el estrecho canal del río, hacia el oeste. La otra, en la isla fronteriza al poblado llamada “El espinillo”. A estas baterías Belgrano las llamó Libertad e Independencia, con un claro sentido independentista.
En esas circunstancias, con motivo de inaugurarse la batería Independencia, y careciendo de bandera para ello, dispuso la confección de una con los colores de la escarapela, cual reza el documento más significativo en la historia de nuestra bandera:
“Excelentísimo Señor:
En este momento que son las seis y media de la tarde se ha hecho la salva en la batería de la Independencia, y queda con la dotación competente para los tres cañones que se han colocado, las municiones y la guarnición.
He dispuesto para entusiasmar las tropas y estos habitantes que se formasen todas aquellas y les hablé en los términos de la nota que acompaño.
Siendo preciso enarbolar bandera y no teniéndola, la mandé hacer blanca y celeste conforme a los colores de la escarapela nacional; espero que sea de la aprobación de Vuestra Excelencia.
Dios guarde a Vuestra Excelencia muchos años.
Rosario, 27 de febrero de 1812.
Excelentísimo señor.
Manuel Belgrano [Rubricado]
Excelentísimo Gobierno Superior de las Provincias Unidas del Río de la Plata”. 1
Sin esperar respuesta mandó hacerla para la primera batería habilitada. En ocasión de su inauguración, que se realizó al día siguiente en tierra firme (próxima a la batería Libertad aún en construcción), Belgrano tomó juramento de lealtad a la guarnición destinada a su servicio:
“Soldados de la Patria: En este punto hemos tenido la gloria de vestir La escarapela nacional que ha designado nuestro Excelentísimo Gobierno: en aquel, la Batería de la Independencia, nuestras armas aumentarán las suyas; y juremos vencer a nuestros enemigos interiores y exteriores y la América del Sud será el templo de la independencia, de la unión y de la libertad. En fe de que así lo juráis, decid conmigo ¡Viva la Patria”! 2
La ceremonia de inauguración, al decir de los historiadores y poetas, alcanzó contornos emotivos. Según Yaben “al ocupar las tropas su puesto de honor, enarbolaron la bandera azul celeste y blanca, desplegándose en paño batido por el viento, mientras la saludaba una salva de cañonazos. Así se inauguró la bandera argentina, en la tarde del 27 de febrero de 1812, en momentos en que el sol se ocultaba en el ocaso, besando con sus últimos rayos el símbolo sagrado de nuestra redención política”.
En oficio al Triunvirato, Belgrano expresaba lo siguiente:
“Las banderas de nuestros enemigos son las que hasta ahora hemos usado; pero ya que Vuestra Excelencia ha determinado la escarapela nacional con que nos distinguiremos de ellos y de todas las naciones, me atrevo a decir a Vuestra Excelencia que también se distinguieran aquellas, y que en estas baterías no se viesen tremolar sino las que Vuestra Excelencia designe. ¡Abajo, Excelentísimo Señor, esas señales exteriores que para nada nos han servido y con las que parece que aún no hemos roto las cadenas de la esclavitud!”. 3
Este documento revela el espíritu independentista de Belgrano, que en un acto verdaderamente revolucionario, creó y ordenó enarbolar nuestra enseña patria. El Triunvirato ese mismo día despachaba la orden que, apenas fuera esta recibida, Belgrano debía partir para reemplazar a Juan Martín de Pueyrredón, Jefe del Ejército Auxiliar del Perú. Probablemente ambos oficios se cruzaron en el camino, pues Belgrano manifestó que se puso en marcha el 2 de marzo y la orden del gobierno, desautorizando su gesto de creación de una bandera, llegó al día siguiente.
El Triunvirato, pues, informado del asunto, desaprobó el 3 de marzo la creación de la nueva bandera, casi que volviendo sobres sus pasos, y ordenó a Belgrano “que haga pasar aquella demostración de la bandera blanca y azul celeste enarbolada ocultándola disimuladamente y subrogándola con la que se le envía que es la que hasta ahora se usa en esta fortaleza, y que hace al centro del Estado, procurando en adelante no prevenir las deliberaciones del Gobierno en materias de tanta importancia y en cualquiera otro que una males inevitables difíciles de repararse con buen suceso”. 4
No llegó Belgrano a enterarse de la prohibición dispuesta del gobierno pues en cumplimiento de la citada orden de aquel del 27 de febrero había salido el 2 de marzo de Rosario camino al Noroeste para asumir el comando en jefe en Jujuy del Ejército Auxiliador del Perú.
Ignorando el criterio del gobierno y creyendo que la bandera enarbolada en Rosario había sido aprobada, para solemnizar el segundo aniversario de la Revolución de Mayo, el 25 de ese mes, Belgrano presentó en Jujuy otro ejemplar de la bandera, que mandó confeccionar allí diciendo a sus tropas en una proclama: “por primera vez, veis la Bandera Nacional en mis manos, que ya os distingue de las demás naciones del globo”, lo que significaba romper abiertamente el vínculo con la corona de España. Esa Bandera Nacional una vez bendecida fue paseada triunfalmente y jurada por las tropas.
El gobierno en oficio del 27 de junio de 1812 reiteradamente lo desautoriza en nuevos términos. Este oficio, dado la lentitud de las comunicaciones, recién en julio le llega a Belgrano advirtiendo que el Gobierno desautorizaba en duros términos la creación de la bandera y ordenaba que: “haga pasar por un rasgo de entusiasmo el suceso de la Bandera blanca y celeste enarbolada; ocultándola disimuladamente y subrogándola con la que se le envía, que es la que hasta ahora se usa en esta Fortaleza, y que hace el centro del Estado; procurando en adelante no prevenir las deliberaciones del gobierno en materia de tanta importancia y en cualquiera otra que una vez ejecutada no deja libertad para su aprobación, y cuando menos produce males inevitables difíciles de repararse con buen suceso”. 5
Afectado por esos términos, Belgrano se apresuró a sincerarse, declarando que ignoraba la anterior resolución: “en la batería que se iba a guarnecer no había bandera y juzgué que sería la blanca y celeste la que nos distinguiría como la escarapela, y esto, con mi deseo de que estas provincias se cuenten como una de las naciones del globo, me estimuló a ponerla”. Belgrano acató la resolución gubernamental y en su respuesta del 18 de julio expresa entre otras consideraciones lo siguiente: “la bandera la he recogido y la desharé para que no haya memoria de ella y si acaso me preguntasen por ella, responderé que se reserva para el día de una gran victoria por el ejército, y como esta está lejos, todos la habrán olvidado y se contentarán con lo que se les presente”. La bandera creada por Belgrano tuvo su bautismo de fuego en la Batalla de Salta (20 de febrero de 1813).
Por otra parte, poco después de proclamarse la Independencia de las Provincias Unidas de Sud América, el Congreso de Tucumán en la sesión del 20 de julio de 1816, expidió un decreto especificando los colores “celeste y blanco” para la bandera menor entretanto se fijaran los jeroglíficos de la bandera nacional mayor 6 . El 25 de febrero de 1818, el Congreso aprobó el dictamen del diputado Chorroarín y se estableció que “sea distintivo peculiar de la bandera de guerra un sol pintado en medio de ella”. 7
1 ARCHIVO GENERAL DE LA NACIÓN, Sala X, 44-8-29 y 44-8-30 en MINISTERIO DEL INTERIOR, La Bandera Nacional de la República Argentina, Buenos Aires, p. 21.
2 Ibidem.
3 ARCHIVO GENERAL DE LA NACIÓN, Sala X, 44-8-29 en MINISTERIO DEL INTERIOR, La Bandera Nacional de la República Argentina, ob. cit., p. 136.
4 ARCHIVO GENERAL DE LA NACIÓN, Sala X, 44-8-29 y 44-8-30 en INSTITUTO NACIONAL BELGRANIANO, Documentos para la Historia del General Don Manuel Belgrano, t. IV 1811-1812, Buenos Aires, 2003, p. 423.
5 ARCHIVO GENERAL DE LA NACIÓN, Sala X, 44-8-29, en INSTITUTO NACIONAL BELGRANIANO, Documentos para la Historia del General Don Manuel Belgrano, t. IV 1811-1812, ob. cit., p.431.
6 ARCHIVO GENERAL DE LA NACIÓN, Sala X, 3-9-4, en MINISTERIO DEL INTERIOR, La Bandera Nacional de la República Argentina, ob. cit., p. 136.
7 ARCHIVO GENERAL DE LA NACIÓN, Sala X, 44-8-29 y 44-8-30, en INSTITUTO NACIONAL BELGRANIANO, Documentos para la Historia del General Don Manuel Belgrano, t. IV, ob. cit., p. 453.
Comentarios
Publicar un comentario